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21 31.07.2020 Este año, la triatleta panameña Cristina Mata fue elegida para ser parte de la Se- lección de Ciclismo de Panamá. Mata, abogada de profesión, lleva 11 años practicando el deporte. Antes entrenaba dos veces diarias, en exteriores, y podía sumar hasta cinco horas en bicicleta. Ahora, en su domici- lio, intenta hacer un solo turno, pero que sea de calidad. Junto a sus dos hijos, esposo y masco- tas, la atleta está pasando estos días en ELLAS.pa "ES MI ADORNITO, ES MI CASA, HAGO LO QUE QUIERA, MI MADRE JAMÁS ME HABRÍA DEJADO". MANEJANDO BICICLETAENLASALA Cristina Mata- triatleta su residencia de playa. En una esquina de la sala colocó una bicicleta con ro- dillo inteligente que permite hacer ci- clismo en interiores. “Es mi adornito. Es mi casa y hago lo que quiera, mi madre jamás me habría dejado ¡ja!". Con el rodillo inteligente puede partici- par de carreras en línea, algo que ha descubierto durante este tiempo y que le ayuda a mantenerse motivada. “Las carreras las disfruto mucho porque me traslado a lo que me gusta, sufrir y en- cender ese botón competitivo que me encanta. No puedo pasar todo este tiempo entrenando o fortaleciendo pa- ra un futuro incierto, no soy yo. Disfruto el momento, y compito si es posible”. Practica natación en el mar o en una piscina, “es chiquita, pero resuelvo”. También corre, en su hora de salida y cerca de su casa. Durante esta pandemia, su hogar de playa también se ha convertido en un estudio de arte. Su esposo, el artista pa- nameño Emmanuel Moses, adecuó un área para su taller. “Fue trabajo en equi- po, mandamos a buscar sus pinturas, bastidores, pinceles, todo. Nuestros hijos ahora comparten cuarto y la otra habitación se ha convertido en el estu- dio”. “En algún momento de nuestras vidas soñamos con vivir en la playa, estar más tiempo con nuestros hijos, poder pintar 24 horas al día, trabajar desde ca- sa y poder entrenar. Sin querer querien- do, mira lo que pasó”.